“ Sí, ya sé que hay que estirar y hacer deporte ¡pero no tengo tiempo! ”, “ para ti es fácil decirlo porque no tienes hijos ”, “ me tiro todo el día trabajando y hecho polvo y luego no tengo ganas de ir a un gimnasio ”.
Todo esto es entendible, encajar una rutina de estiramientos y ejercicios en nuestro día a día con miles de responsabilidades, trabajo, niños, aprender un idioma o a tocar un instrumento...
Pero ¿ realmente no puedes sacar 45 minutos ( o 20 si solo vas a estirar ) 2 días a la semana?
No es necesario empezar a lo grande ni marcarse metas ilusorias. Vamos a empezar poco a poco y ya iremos viendo...
Tampoco hace falta apuntarse a un gimnasio, en casa también podemos.
¿Trabajas y tienes hijos? : Dos días a la semana tu pareja puede darles la merienda ( o la cena o lo que sea ) mientras tú estiras o te vas a correr , y otros dos días te ocupas tú.
¿Nunca has hecho deporte y tienes un poco de sobrepeso? Si te da vergüenza ir al gimnasio ¡no hace falta! Empiezas a tu ritmo en tu casa, con la música que a ti te guste o tu programa de radio favorito. Hay profesionales que cuelgan videos de rutinas de ejercicios en sus canales de you tube, yo los utilizo.
¿Una casa abarrotada de gente? Algún momento habrá de tranquilidad ¡ aprovéchalo!, en tu dormitorio, o en un parque. U os juntáis 2 amigas en la casa que más tranquila esté.
Creo que la gente supone que a mi no me cuesta porque he sido competidora. ¡Cuesta siempre! ¡Cuesta cada vez! Y más si has estado con alergia ( cosa que me pasa de vez en cuando) y llevas una semana sin moverte... que empiezas a estirar y ¡ te da una pena de como estás ! ... ¡menos mal que el cuerpo aprende y recuerda rápido!
A veces cuando me entra la pereza, me pongo el chandal pero me digo que no hace falta que entrene... ¡qué autoengañada me tengo! Y ya solo con vestirme “para la tarea” me motiva... y si no, me sigo engañando: “ bueno, voy a estirar un poquillo y luego ya veré”, y termino entrenando :)
Tengo comprobado que se me ocurren soluciones a los problemas justo cuando estoy haciendo deporte; y cuando estiro es un buen momento para fijarme en cada sensación ( como si fuera un ejercicio de mindfullnes) para repasar qué tengo que hacer al día siguiente, para relajarme un poco y parar el tiempo a mi alrededor. Si hay “follón” en tu casa te pones los auriculares ¡ o tapones !
Como toda la información que te llega, debes adaptar lo que te cuento a tu forma de vida, a tus ocupaciones, los resultados que quieres conseguir , el punto en el que estés y a tu horario. Solo tú sabes como encajarlo en tu vida ¡pero hazlo! Porque hará que te sientas mejor.